martes, 19 de agosto de 2014

Incertidumbre

El futuro, cronológicamente está por venir, como la próxima Navidad, pero antropológicamente está por hacer, es decir, que es incertidumbre que depende de nuestras presentes acciones.












La incertidumbre impresiona, pese a que tenemos eficaces herramientas para reducirla:


- Nuestra capacidad para imaginarnos fines valiosos y poner los medios con creatividad y tenacidad para acercarnos a ellos.








- Los convencionalismos ( idioma, moral, dinero... ), espontáneos, heredados y en lenta pero continua transformación, que nos permiten anticipar algunos de los comportamientos de los integrantes de nuestro grupo.















La incertidumbre impresiona hasta el punto de ser capaces de imaginarnos que el futuro es planificable y dejar que otros nos lo planifiquen a cambio de seguridad.













 La planificación anula nuestra capacidad para acercarnos a nuestros fines valiosos e impone caminar hacia unos fines ajenos e irrealizables. Menudo plan.




No hay comentarios:

Publicar un comentario